El siglo XX estuvo marcado por el auge y consolidación de la radio, televisión y teléfono, mientras que el siglo XXI es la revolución del internet y la democratización de la información.
A lo largo del siglo XX, la comunicación experimentó una transformación significativa, marcada por avances tecnológicos que alteraron radicalmente la forma en que las personas se conectaban entre sí. Durante gran parte del siglo, los medios tradicionales, como la radio, la televisión y el teléfono, dominaron el panorama de la comunicación.
En la segunda mitad del siglo XX, la televisión se convirtió en una poderosa herramienta para la difusión masiva de información y entretenimiento. La telefonía evolucionó desde las líneas fijas hacia la movilidad, con la llegada de los teléfonos móviles en la década de 1980. Estos avances permitieron una comunicación más rápida y accesible.
Sin embargo, la verdadera revolución llegó con el advenimiento de Internet en el siglo XXI. Internet ha transformado radicalmente los modos de comunicación al permitir la conexión instantánea a nivel global. Las redes sociales, el correo electrónico y las aplicaciones de mensajería han redefinido la forma en que las personas interactúan, eliminando las barreras geográficas y permitiendo la comunicación en tiempo real.
La rapidez y la accesibilidad de Internet han democratizado la creación y distribución de contenido. Plataformas como YouTube, blogs y redes sociales han permitido que cualquier persona comparta su voz y perspectiva con audiencias globales. Esto ha cambiado la dinámica de la comunicación, dándole a la audiencia un papel más activo en la creación y difusión de información.
Además, la videoconferencia y la transmisión en vivo han llevado la comunicación a un nivel completamente nuevo, especialmente en el contexto laboral y educativo. La pandemia de COVID-19 aceleró esta tendencia, destacando la importancia de la conectividad digital para mantener la comunicación en tiempos de crisis.
En resumen, el siglo XX experimentó una evolución constante en los modos de comunicación, desde los medios tradicionales hasta la movilidad de la telefonía. El siglo XXI, sin embargo, será recordado como la era de Internet, que ha transformado la comunicación de una manera sin precedentes, brindando una conectividad global y cambiando la forma en que las personas se relacionan, comparten información y colaboran.